Introducción
La cromoterapia, también conocida como terapia del color, es una práctica que utiliza los colores para equilibrar y armonizar las vibraciones del cuerpo humano. Esta técnica se basa en la idea de que cada color del espectro de luz tiene una longitud de onda específica y una energía particular que puede influir en nuestro bienestar físico y emocional. Desde tiempos antiguos, diversas culturas han utilizado los colores como una forma de tratamiento natural para aliviar enfermedades y mejorar la salud general.
En este texto, exploraremos cómo la luz y los colores pueden ser utilizados para tratar diferentes condiciones de salud. Aprenderemos sobre las propiedades curativas de cada color y cómo aplicarlos de manera efectiva para obtener los mejores resultados. Además, descubriremos métodos prácticos para incorporar la cromoterapia en nuestra vida diaria, ya sea a través de la exposición directa a la luz de colores específicos o mediante la carga de agua con la energía de estos colores.
Cromoterapia
La luz es energía radiante que viaja en forma de olas. La rata vibratoria puede ser medida en unidades conocidas como unidades de angstrom, que es una diezmillonésima de un milímetro. Por ejemplo, el color violeta tiene una longitud de onda de 4,000 a 5,000 Å, el color índigo de 4,500 a 4,700 Å, el color azul de 4,700 a 5,100 Å, el color verde de 5,100 a 5,600 Å, el color amarillo de 5,600 a 5,900 Å, el color naranja de 5,900 a 6,200 Å y el color rojo de 6,200 a 6,700 Å.
El cuerpo humano selecciona de los rayos solares los colores que necesita para balancear las vibraciones dentro del cuerpo. El principio de la cromoterapia es darle al cuerpo enfermo un extra de color de acuerdo a la necesidad de curar. Este tratamiento a través de los colores es un tratamiento natural que cada persona puede realizar. La aplicación se puede realizar de diversas formas, como explicaré más adelante.
- El color rojo del espectro estimula.
- El color azul calma.
- El color rojo: excelente para tratamientos de la sangre, regenera y da vigor, cura la anemia y las afecciones del hígado.
- El color naranja: es bueno para los problemas respiratorios, el asma y la bronquitis; es un tónico y un laxante.
- El color amarillo: excelente para los intestinos, es un sedante suave, eleva mentalmente, elimina los temores y miedos excesivos, es bueno contra la indigestión, las constipaciones y ayuda con los problemas menstruales.
- El color verde: es el color ganador por excelencia, es neutral para otros colores, puede ser un gran tonificante y vitalizador, muy eficaz en problemas cardíacos, dolores de cabeza, neuralgias, úlceras y para curar resfriados.
- El color azul: es un antiséptico y refrescante, excelente contra las inflamaciones, inclusive de órganos internos, bueno para el reumatismo y en las cortadas y quemaduras.
- El color índigo: es un suave narcótico, elimina el temor a la oscuridad, muy recomendable en los desórdenes mentales y emocionales, para la sordera y bueno para los ojos, en especial para curar las cataratas.
- El color violeta: excelente para desórdenes mentales, mejora el sistema nervioso y lo calma, bueno contra la calvicie.
Lo importante es el color, no importa qué lo produce; puede ser un vidrio, un bombillo de ese color, lo importante es que se produzca el color deseado. El tratamiento se realiza dos veces al día durante 30 minutos cada vez, se dirige el color hacia la zona afectada y la mejoría se verá pronto. Se realiza un tratamiento por la mañana y otro por la tarde.
Se puede convertir el agua en medicina potente cargándola con los colores y su luz curativa. Se busca un envase o una botella del color deseado, se llena de agua y se pone al sol durante 8 horas. Tomar un vaso con agua cargada tres veces al día, el efecto es impresionante.
Si se siente deprimido, decaído y sin energía, tomar un vaso con agua cargada de color rojo y notará cómo cambia de inmediato.
Si tiene problemas para dormir, tomar un vaso con agua cargada de color índigo y dormirá perfectamente. Estos tratamientos combinados con el agua cargada del color indicado se llaman hidrocromopatía.
La curación a través de los colores o la cromoterapia se puede realizar a distancia y sin tener al paciente cerca o a la vista. Este método se llama grafocromopatía. Se utiliza una fotografía del enfermo, en la cual esté solo y de cuerpo entero, se coloca la foto bajo la luz indicada de acuerdo a la enfermedad padecida y se deja allí durante tres horas diarias. La mejoría no se hará esperar. La curación a través de una foto es magia simpática, lo mismo se utiliza para curar que para enfermar y dañar, se proyecta por el mismo canal energético áurico magnético.
Nivel: Básico
Nota: Recuerda Siempre Asistir a Tu medico de Confianza